Mi Bella Montería ( Porque el que es kaballero... Repite! )

Me levanté ese día con una fuerza de voluntad tan ferrea como la de un adolecente que se priva de la masturbación por deseo propio, decidido a salir de mi encierro auto-impuesto y volver a ese pequeño pedacito de paraiso sobre valorado económicamente por algunos (ladrones del municipio) pero menospreciado de manera sentimental por muchos (proletariado despistado).

He aquí un pequeño resumen de más de 4 mil palabras para que se distraigan, y bueno la moraleja de todo esto, que de hecho son dos, es: No dejes a una inexperta madre comprar artículos electrónicos impulsivamente y valoren las pocas cosas buenas que tenemos porque bien cara que nos salío este "parque temático de atracciones".